sábado, 13 de mayo de 2023

LOS OFENDIDITOS, LA NUEVA ESTIRPE DE IMBÉCILES

 

En estos tiempos tenebrosos que nos toca vivir, donde la palabra "libertad" se usa precisamente para coartarla e imponer ideologías perversas y un adoctrinamiento feroz, ha surgido un nuevo espécimen de primate, el ofendidito. Se trata por lo general de una caterva de inútiles, ignaros y acomplejados aquejados de una idiocia en estado terminal que se pasan el día buscando cualquier cosa con la que ofenderse. Los ofendiditos, como no dan un palo al agua, viven o, mejor dicho, parasitan en casa de sus padres, no tienen oficio ni beneficio y no saben hacer la O con un canuto, pues se limitan a hacer méritos para ser aceptados en las filas de estos partido anti-sistema que acogen de buen grado a todo aquel cuyo C.I. no llegue al de un bonobo para usarlos como carne de porra en las manifas donde los de la UIP los brean a palos. 

Como papá les regala un ordenador o un esmarfon con tal de tenerlos entretenidos, pues se apuntan a todas las redes sociales del planeta para que puedan proclamar lo ofendidos que se sienten por cualquier soplapollez. En vez de ayudar en la casa a planchar, fregar el suelo, a emparejar calcetines o hacer los mandados a mamá, pues se pasan horas y horas  recluidos en sus antros  bicheando en las ediciones digitales de la prensa a la caza y captura de algo ofensivo para, a continuación, rasgarse las vestiduras y amenazar con cometer seppuku, cosa que, por desgracia, jamás cumplen. Ahí ven a la niña siniestra, que afirma que le han arruinado la infancia habiendo nacido en un país con uno de los mejores niveles de vida del planeta. Babea, berrea, insulta, hace muecas y se le hinchan las venas del pescuezo mientras despotrica porque anteayer vio como un gorrión fue arrollado por un ferrocarril, por lo que exige que se prohíba el tráfico ferroviario diurno en todo el planeta para que los gorriones puedan volar sin tener de qué preocuparse. Eso sí, de los chavales fusilados por los orcos rusos en Ucrania o de las familias masacradas en Sudán, ni caso. Que se jodan, que para eso son unos primates de mierda.

Bien, a estas alturas muchos se preguntarán a santo de qué este avenate. Pues a un ridículo suceso acaecido hace ya unos diez años y del que nadie se acuerda, salvo yo, que tengo memoria de elefante. ¿Recuerdan esta foto? Dio la vuelta al mundo...


Pertenece a un fulano de las tropas gabachas (Dios maldiga al enano corso) que servían en Mali para impedir que los probos ciudadanos melaninos del país se sacaran las tiras de pellejo entre ellos. Como ven, muestra una máscara que representa la jeta de la muerte, una calavera. Está de más decir que los medios de comunicación, espoleados por las avalanchas de ofendiditos, tardaron 0'2 en clamar ante aquella preclara alegoría a la muerte y la destrucción. Que lleve un fusil de asalto, que vaya con un chaleco balístico forrado de cargadores y bombas de mano y que esté dispuesto a abrir fuego contra cualquiera que se ponga chulo es lo de menos. Lo importante, lo grave, lo que clama al cielo es que lleva una máscara con una canina.

Así comenzó "El Mundo", un diario con una línea editorial mobile qual piuma al vento, el artículo sobre la noticia: "En cada campo de batalla siempre hay una imagen provocadora que genera debate al tiempo que se convierte en icono, en símbolo de la devastación y la deshumanización que engendra la guerra. El contexto violento crea en las fotografías nuevas capas de lectura donde, quizá en la toma, no había intención de generar controversia." Terrible, apocalíptico, horripilante, un testimonio implacable de la maldad humana en general y del fulano de la máscara en particular. 

Los periodistas, apremiados por los ofendiditos, ni se preocuparon en indagar el cómo y el por qué de aquella siniestra máscara, y hasta los altos mandos del ejército gabacho se vieron obligados a jurar por la vil osamenta del enano corso que aquello era impropio del honneur y la grandeur del armée française, y aseguraron que abrirían una investigación para averiguar quién era el fulano de la máscara y castigarlo debidamente, y si hacía falta lo fusilaban al amanecer, qué carajo. Está de más decir que aquella chorrada se olvidó al cabo de dos o tres días. El ejército gabacho hizo el paripé para aplacar los ánimos, los periodistas encontraron otros embustes en los que perder el tiempo y mentir a destajo, y los ofendiditos siguieron haciendo el gamba en el Feisbú y el Tuiter, dedicándose a insultar a todo aquel que no comulgue con su..."¿ideología?".

Ahora, la verdad del credo. ¿Se preocuparon de verdad en averiguar el origen de esa máscara? Algunos lo mencionaron, pero fueron callados de inmediato porque, obviamente, si se les escuchaba, toda la movida quedaría reducida a nada. Bien, aquí tienen la terrible máscara, la siniestra alegoría de la muerte que el gabacho lucía para acojonar negritos y dejar claro al personal que tenía muy mala leche y estaba deseoso de cargarse al ciento y la madre: una máscara de neopreno de motero. En aquella época costaban unos 12 pavos, y se usaban para el frío. Por aquel entonces estaba yo metido de lleno en mi faceta de motero golfo y disoluto y, por lo general, los moteros custom solíamos usar cascos abiertos. Por ese motivo, en invierno te pelabas la jeta de frío, y en verano te comías 5 kilos de mosquitos a las primeras de cambio. Yo no usé nunca esas máscaras porque me resultaban incómodas, por lo que me colocaba un pañuelo negro en plan asaltador de diligencias. Pero eran un accesorio muy habitual entre las tribus moteras, de eso doy fe y pueden buscar en la red, donde verán infinidad de modelos similares. Con todo, esa en concreto es la que llevaba puesta el tipo de la foto.

Captura de pantalla donde podemos ver una ínfima muestra de máscaras tenebrosas y alegóricas


Otro siniestro portador de la Muerte, pero en moto

¿Qué por qué se compró esa, y no una con la jeta de Ken o de Homer Simpson? Primero, porque no las fabrican, y segundo, pues porque le salió de los cojones, por ejemplo. En todos los ejércitos del planeta se usan símbolos que invocan a la muerte para acojonar al enemigo. Los Húsares de la Muerte tedescos usaban una calavera, el Regimiento de Caballería Lusitania Nº 8 usa una calavera, los SS usaban una calavera, y mogollón de guripas de todo el mundo se tatúan calaveras en los brazos para darle morbo a las mocitas, que así piensan que están ante un probo homicida novio de la Muerte y se dejan meter mano con más prontitud. En cuanto a los moteros, en cualquier concentración ves más calaveras que en una fosa común. En el mundillo de la moto, los símbolos relacionados con la muerte son muy comunes, representando una forma de desafío a la misma o para ahuyentarla. Calaveras, la bola 8, bichos tenebrosos, calaveras de monstruos, águilas, serpientes venenosas, etc. Imagino que si los ofendiditos se personan en cualquier movida de estas arde Troya,

En fin, vivimos en una patética sociedad en la que ya no cabe un tonto más, a pesar de lo cual se reproducen como hongos. Estos ablandabrevas pretenden alcanzar la ridícula utopía de una planeta habitado por gente guay, maravillosa, por seres de luz que se desvivan por hacer el bien mientras a ellos los colocan en el Ministerio de la Bondad cobrando jugosos estipendios. Valiente panda de gilipollas, carajo... En fin, si en vez del fulano con la máscara de neopreno se topan con el de esta foto igual les de una pájara y se quedan en el sitio.


Hale, he dicho


Otro "psicópata" haciendo gala de su máscara mortuoria. Ofendiditos, no tengáis piedad. A saco con él, qué carajo...

No hay comentarios: